Maestría en Ciencias Farmacéuticas

Líneas de Generación y Aplicación del Conocimiento

El plan de estudios de la Maestría y Doctorado en Ciencias Farmacéuticas consta de dos niveles: Nivel I (Maestría) y Nivel II (Doctorado), ambos están soportados en las siguientes líneas de generación y aplicación del conocimiento (LGAC):

1. Diseño Obtención y Evaluación de Fármacos y Biomoléculas.

2. Diseño y Evaluación de Formas Farmacéuticas.

3. Farmacia Clínica y Servicios Farmacéuticos.

En estas tres líneas se agrupan todos los proyectos de investigación desarrollados en el Departamento de Sistemas Biológicos desde 1999.

La LGAC de DOEFB es una disciplina en la que convergen la química y la farmacología. Sus objetivos son el diseño, la síntesis y la identificación de compuestos con actividad biológica, así como la evaluación de sus mecanismos de acción a nivel molecular, las relaciones que existen entre su estructura química y su actividad biológica, sus productos de biotransformación y los mecanismos para su eliminación. Al establecer una relación entre la estructura química y la actividad farmacológica se puede proceder al diseño racional de nuevos fármacos.

La química medicinal es una ciencia interdisciplinaria que combina a la química orgánica, química computacional, farmacología, bioquímica, farmacognosia, biología molecular, estadística, fisicoquímica entre otras. Los nuevos principios activos se pueden obtener por síntesis o a partir de fuentes naturales como plantas o animales. Estos compuestos pueden ser modificados químicamente para mejorar sus características, hacerlos más activos, disminuir su toxicidad, mejorar la forma en que el organismo los puede absorber y también la forma en que puede eliminarlos una vez que han cumplido su función.

De acuerdo con la OMS (1979) una planta medicinal es cualquier especie vegetal que contiene sustancias que pueden ser empleadas para propósitos terapéuticos o cuyos principios activos pueden servir de precursores para la síntesis de nuevos fármacos. La Ley General de Salud y el Reglamento de Insumos para la Salud, diferencian un medicamento herbolario de un remedio herbolario; el primero tiene evidencias científicas para su uso, mientras que con el remedio herbolario su uso sólo se apoyará en el conocimiento tradicional.

En México, el conocimiento de la medicina tradicional ha permitido encontrar numerosos compuestos con actividades biológicas relevantes y al realizar modificaciones estructurales a las moléculas se han desarrollado estudios de la relación estructura química-actividad.

Para las nuevas moléculas es requerido conocer y evaluar la farmacodinamia, la farmacocinética y la toxicología antes de proponer su uso en humanos. Estos estudios preclínicos están considerados dentro de la Química Medicinal.

Los procesos de preformulación, producción y evaluación de medicamentos son temas de investigación en la LGAC de Diseño y Evaluación de Formas Farmacéuticas. A partir de una visión crítica del contexto actual y de las transformaciones de la industria químico-farmacéutica, se promueven estudios para: el desarrollo tecnológico de formas farmacéuticas innovadoras, de productos biotecnológicos y de aquellos derivados de la nanotecnología. Se busca cumplir con los requerimientos y necesidades de la industria farmacéutica y del ámbito sanitario a nivel nacional e internacional.

Como parte de la evaluación de los medicamentos, los estudios biofarmacéuticos son de gran relevancia ya que determinan la seguridad y biodisponibilidad de los nuevos medicamentos y posibilitan la formulación de medicamentos intercambiables.

Para asegurar la calidad de vida de un paciente son necesarios la atención y los servicios farmacéuticos. Esta LGAC involucra la Farmacia hospitalaria, la farmacovigilancia, la farmacoeconomía, la tecnovigilancia, la epidemiología, etc. La situación actual de los servicios farmacéuticos en México es un tema con un alto grado de complejidad debido al contexto propio del país. Por lo tanto, es importante conocer la situación real de los servicios farmacéuticos con el objetivo de que se tomen las decisiones necesarias para mejorar la calidad de vida del paciente y promover el uso racional del medicamento.


De acuerdo con los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), es necesario ubicar al paciente como el principal beneficiario de las acciones en los servicios farmacéuticos. Para ello se requiere formar en los profesionales de la salud actitudes y valores éticos, proporcionar los conocimientos, desarrollar destrezas y sentido de la responsabilidad para asegurar una mejor atención y calidad de vida a los pacientes.


Se requiere realizar programas y proyectos que analicen y propongan mejoras a los modelos y políticas vigentes para la comercialización, adquisición y dispensación de medicamentos y distintos insumos para la salud. Se debe investigar, analizar y se proponer mejoras a las actividades del ejercicio profesional farmacéutico en la oficina de farmacia, en el hospital y en otros ámbitos.